para mi todo lo pekeño es grande. Si atrapas con fuerzas esa pekeñas_cosas que te suceden alrededor y que muchas veces por pekeñas se nos escapan de entre los dedos seguro que todo en tu vida se hace grande. Hacer las pekeñas_cosas grandes es lo que intento hacer yo. Es mi filosofía de vida. No necesito grandes historias, grandes viajes, grandes acontecimientos, grandes ilusiones. Me conformo con todas esas pekeñas_cosas que me rodean. Me gustan mis pekeñas_cosas.

20 septiembre 2006

aprendido_desde_pekeña


Y es que lo que aprendes desde pekeño es muy difícil olvidarlo, y me refiero a las costumbres. Ha esa conclusión he llegado esta semana. Bueno ya lo había comentado alguna que otra vez, pero esta semana, la semana del fin de la jornada reducida y la vuelta a ‘el tuppering’, es decir la vuelta a comer en el curro, he corroborado que estaba en lo cierto, si, estaba en lo cierto, si hay algo que aprendiste cuando aun te sacabas mocos a escondidas y llevabas zapatillas de velcros, eso , eso no se olvida jamás.

Y es que dentro de esas costumbre podemos catalogarlas como buenas costumbres o malas costumbres, o bueno podemos catalogarlas como buenas costumbres que es situaciones pueden pasar a ser malas costumbres. Y es que la costumbre de la que os voy a hablar yo la aprendí desde pekeña. Es la costumbre de ‘imposible dejar nada de comida en el plato’

Esta costumbre que como tal, es una buena costumbre por todo lo que implica y porque cuando te la ensañaron se basaron en unos principios para inculcártela… bien pudiera ser que la comida es un bien y este no se puede tirar, que hay muchos niños que no pueden acceder a la comida y que es por eso que es un privilegio el dejar algo en el plato, o que la alimentación es algo importantísimo….pasa a ser durante toda tu vida una costumbre buena que tiende a mala en ocasiones, incluso me lanzaría a decir que tiende a catastrófica!!

Y es cuando por la mañana, aun con legañas en los ojos, preparas tu tupper de lentejas en el cual empiezas a servir un cazo detrás de otro sin ningún tipo de control numérico (numero de tazones) o sin ningún tipo de control lineal (fijándote en esa marca que indica que pasarte de ella supone doble ración). Y es cuando llega el mediodía y te dispone a comer, sacas el tupper y ni te fijas en tu contenido, aunque el peso del recipiente indica que vas a terminar de lentejas hasta el culo, lo metes en el microondas y listo preparada para el gran festín, porque con tanta lenteja pasa de festín a secas a ‘gran festín’.En ese momento eres consciente de que se te va a complicar la comida empiezas a comer, cucharada que va y que viene, una detrás de otra, iup, iup, y ya tu tripa empieza a decir que hasta aquí hemos llegado….posas la cuchara…mira el tupper…y que es lo que ven tus ojos!!! AUN QUEDAN LENTEJAS EN EL DICHOSO TUPPER! ‘ entonces es cuando se cortocircuetean tu raciocinio adulto de ‘no puedo mas, voy a explotar’ y la frase que oíste durante toda tu infancia ‘venga, izas, la ultima cucharada para dejar el plato limpio’…cojes la cuchara y sin respirar no paras hasta terminártelo. Luego mas tarde es cuando explotas y tus compañeros has de meter tus pedazos en una bolsa pero eso lo contare otro día.
Este es el sino de la buenas costumbres que pueden llegar a ser muy muy muy malas costumbres!

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya sabes, querida Belinda, que a mi personalmente esto que comentas de los tuppers no me pasa... Aunque corro el riesgo de no pasar el casting de Cibeles... No dios!!!

Y yo, todavía sigo usando zapas con velcro!!

belinda dijo...

y yo!
pero porque tenemos algo de peterpanes reflejado en zapas con velcros!

Sam dijo...

Una vez llegado el momento de "ya no puedo más, pero para lo que queda... termino", llega el efecto "los panes y los peces" y en tu tupper la comida se multiplica! crece como para que coma media Etiopia!
Hay que ser muy fuerte y rápido para que esto no se de.

Te entiendo Belinda, yo tengo la misma "buena" costumbre.

Anónimo dijo...

Lo que se aprende de pequeña...no se olvida ...¡Dios mío, cuantísimos años llevo aprendiendo cosas que sí voy a olvidar!

A veces hasta se me olvida que fui pequeña! Pero recupero esos momentos de golpe cuando voy a casa de mi madre...y me dice
" Come y no esparzas la comida por el plato..."
¡ Bendita infancia!

Anónimo dijo...

Cierto! A mí me pasa lo mismo y es que hay algo en esas últimas lentejas...
En ese escuchimizado montoncito de lentejas se concentra toda la inmensa herencia generacional, y al final (a esas alturas, saturada de comer, los pequeños espejos de tu estómago ya las han convertido en indolentes cagadurrias), te mimetizas con su aspecto y te autoflagelas con el símil de "marronazo-mea culpa" y te las comes, manque-reviente!
Y digo yo... a qué tanto rollo? si sólo es cuestión de calcular bien los cazos... Pero qué pasa? que algunos (otra herencia...)comemos más con los ojos que con el estómago y ahí vienen todos los problemas. Luego, jamecucos al canto!!!
Ayyy, es que somos... somos... DIVINOOOOSSSS!!!!
Un beso y no dejes de escribir, me encanta esta nueva cita, en serio.
Un beso.

Anónimo dijo...

A mí me pasa lo que a ti. -Abre el aeropuerto, que viene el avioncito...-Estoy harta.Lo peor de todo es que mi madre no es la única que me va a meter esa muy,muy,mala costumbre, sino que también es mi abuela. No quiero ser dura con ellas, pero me saca de mis casillas que me obliguen a comérmelo todo si antes me he comido por lo menos tres raciones de elefante con patatas.
Un besazo y sigue escribiendo así de bien.

Anónimo dijo...

jajajajajajajajaja
izas!!!!!!!!!!!!!!
me he encontrado con el pasado como te paso a ti cuando viste de nuevo tu ikas!!!!!
me acuerdo de los tuppers de lentejas o de pure o de sopa de pescado q te traias a la ofi!!!!!!
y siempre decias lo mismo "me he pasado......"
jajajajajajajajajajaja

yo es q era mu bruta, asi q al final me terminaban kitando el plato xq no keria y consegui q no me hicieran terminar la comida...

x cierto, cuando kieras ver otra vez tu ikas, ya sabes donde tengo mi casina.

Anónimo dijo...

Me ha pasao lo mismo, yo de pekeño me acostumbré a ser un vago, o quizá fue así xq me lo permitieron mis padres, y así sigo…
Tomad nota aitatxus: ke no os salga un vaguete!!! Id practicando: “¡A estudiar Lola!” “¡A estudiar Jon!!!” “Si no, después no hay chuches!!!!!!” Jejejje